30 noviembre 2007

Estereotipos

Decía Umbral que, cuando no se tiene nada sobre lo que escribir, se escribe sobre la televisión. Voy a escribir sobre la televisión. En concreto, sobre una presentadora que obviaré decir lo que suele comentar mi rival en relación a cómo habrá llegado a estar donde está: Patricia Conde. ¿Soy el único al que no le hace ni puñetera gracia? Es más, creo que es de las personas que van de cómicas o actrices con menos gracia de la historia de la televisión. Se ríe de sus propias frases, se traba y está a años luz de sus compañeros de programa, pero, sin embargo, ahí sigue, en pleno candelabro y seguro que convencida de que ha nacido para hacer lo que está haciendo. ¿Y por qué esta crítica? Por nada en concreto contra ella, sino, más bien, contra la nefasta tendencia que se está impulsando en algunas cadenas –sobre todo algunas privadas, que curiosamente van de progresistas e igualitarias- de situar al frente de programas, informativos y cualesquiera emisión única y exclusivamente a mujeres de gran atractivo físico, algo que no sucede en el ámbito masculino. El otro día leía que una asociación de mujeres periodistas reclamaba la igualdad de salarios con los hombres, algo absolutamente justo. Eso es lo primero, pero tampoco estaría de más que, una vez logrado, se empiece a trabajar también por la no discriminación dentro del propio sexo por la pura apariencia. Es evidente que la televisión es imagen y que, cuanto más agradable sea esa imagen, mejor -de la misma manera que una buena voz es de agradecer en la radio-, pero no cuando el talento que hay detrás de esa apariencia es claramente inferior a otros que se desechan por no ser Miss Universo. Más que nada porque se proyecta una imagen de la mujer que sigue abundando en todos los rancios estereotipos.

29 noviembre 2007

Plaga

Ejemplo de cuadrilla actual: reponedor, abogado, foral, foral, ingeniero, periodista, foral, parado, economista, foral. Ejemplo de cuadrilla en 2020: foral, foral, ex trabajador de Volkswagen, foral, cuidador de ancianos, foral, foral, cuidador de ancianos, jefe de la policía foral, foral de baja. Recuerdo que hace muchos años se comentaba que los jóvenes navarros aspiraban a ser funcionarios. Luego pasaron a querer trabajar en la CAN. Desde hace ya unos años, quieren ser forales. Está muy bien, han ganado con el cambio, porque en cada salto que han dado en el tiempo y en sus preferencias trabajan menos -lo que ya es difícil-. Y sin pasar oposiciones. No lo digo como crítica, sino como información, porque he visto con estos cuatro ojos calendarios anuales de forales y eran una oda a la libranza: ¡oh libranza, apártame de los días laborables, encájame bien los puentes y no permitas que nos llegue ni una sola nueva competencia, amén! Había en aquellos calendarios más cruces que en el cementerio de Normandía. Claro, que este artículo no debería hacerlo, porque anda y que no tengo yo amigos forales. Bueno, yo y cualquiera, porque empieza a haber forales como para llenar El Sadar. Espero, no obstante, que no se me enfaden. Bueno, si se enfadan un poco tampoco pasa nada, que no habré oído ni veces lo de putos periodistas. Ya que les pagamos, qué menos que preguntarnos qué van a hacer, por qué, a cuento de qué 100 nuevos de golpe (un incremento del 12,5%), a qué dedican el tiempo libre (algunos podrían dar másters de gestión del ocio). No sé, algo que nos explicara cuál es la clave de que tantos y tantas beban los vientos por ponerse una boina roja, porque seguro que por ser policías no es. A pesar de todo, enhorabuena a los nuevos y que lo libréis con alegría.

28 noviembre 2007

Altura humana

He estado en Irigaray. Como siempre, había gente a espuertas. Cada vez que entro me reafirmo en el daño que ha hecho Bricomanía. Bueno, finalmente me ha llegado el turno. He comprado una escalera. De camino a mi destino he aprovechado para limpiar los cristales de unos cuantos primeros pisos con unas toallitas limpiagafas que siempre suelo llevar. He llegado al lugar señalado, he colocado la escalera, me he subido y he podido leer lo que desde abajo es prácticamente imposible leer. Es que a mi me gusta leer, también los textos que hay en las placas, así ponga Hasta aquí llegó la riada del 73, En esta casa ensayaban Txomin y Perutxiki o Tomás, ya te dije que no probaras aquellas setas. Si además la placa pretende homenajear a cualquier víctima de movimiento salvapatrias alguno entonces la leo con más motivo, porque un asesinado es un asesinado, aquí y en Tetuán, en 2006 o en 1936. Es lo mismo, hay que rendirle respeto, aunque no se piense como él-ella, sus familias o sus amigos. Es un inocente asesinado en nombre de no sé qué coño. Ojalá hubiera placas que recordaran a todos los que salieron un día de casa y no volvieron, aunque no sé si entonces todos los partidos de nuestro querido ayuntamiento estarían tan de acuerdo. Pero bueno, vamos a la placa que nos ocupa, que, obligado por el Pleno, ha perpetrado el Ayuntamiento de Pamplona en la Ciudadela en recuerdo de los fusilados en el 36. Escondida, a tres metros de altura, pequeña, un auténtico insulto y una indecente falta de respeto. Que no seré yo quien entre a valorar si es razonable poner la placa 70 años después –que creo que sí lo es-, pero, ya que la pones, ten la hombría o la mujería suficientes como para no comportarte como una niña enfadada. Ponla a la altura humana que algunos-as parecen no tener.

25 noviembre 2007

Barra libre

Una de las noticias de la semana ha sido el asesinato de una mujer tras decirle a su ex novio en televisión que no quería saber nada de él. Un hecho tan trágico como predecible -así en general-, visto el contenedor de miserias humanas que son muchos programas, que acogen en sus platós a personas cuando menos desequilibradas para disfrute de los lelos que vemos dichos programas, lo que obliga a revisar el sentimiento de culpa, porque el solo hecho de verlo colabora en la existencia de semejante basura. Vale lo mismo para la gran mayoría de los programas del corazón, que aún no cuentan en su haber con un asesinato –que sepamos- que si no se ha producido todavía es, me parece, de puro milagro. Lo dice Javier Bardem: “El día que alguien le clave un hacha a un periodista porque se ha metido en su baño a grabarle cómo caga, ahí se darán cuenta de los excesos a los que hemos llegado”. Famosos de todo pelaje acosados, grabados con cámaras ocultas, preguntados a todas horas todos los días desde hace años por cuestiones de cualquier clase, la mayoría ofensivas, de mal gusto o directamente privadas. Vamos, que –lo digo en serio- me resulta inverosímil que haya personajes de este periodismo rosa-mierda –no diré nombres, pongan ustedes los que quieran- que aún mantengan las dos piernas rectas, los tabiques nasales en su sitio y los cuerpos libres de moratones. Es más, no digo que me alegraría –tampoco me entristecería-, pero, si sucede, no seré yo el que se eche las manos a la cabeza por inesperado, por mucho que el 95% de los llamados famosos que aparecen en esos programas puedan ser peores que los que hablan de ellos o les entrevistan. Mientras, seguiremos asistiendo al vapuleo mediático del famosillo de turno, al tiempo que nos comemos un yogurt y limpiamos las migas.

24 noviembre 2007

Proceso interno

He tenido que recurrir a la foto-finish en el cajero automático. Es uno de esos que no tiene puerta y que por tanto da a la calle, con lo cual el primero que llega hace su operación. Este en concreto es uno que hay en Nueva con plaza Consistorial. Yo venía por Nueva y he visto a una pareja que llegaba por el otro lado. Ellos también me han visto a mi, han acelerado, yo también, hemos empujado nuestras tarjetas hacia delante como los ciclistas el manillar y ninguno hemos conseguido meterla –los nervios, se supone, que es la primera vez que intento meter una tarjeta en carrera-. “Para mi que he llegao yo antes”, dice él. “Al mundo igual, pero a esto no”, le contesto. “Venga, por favor, que venimos desde Estafeta y Plaza del Castillo, que estaban averiados”, replica. “Yo vengo desde Sarasate y San Miguel, que tampoco funcionaban”, le contesto. Decidimos jugárnoslo a cara o cruz. Como no tenemos monedas, usamos la tarjeta de crédito. “¿Qué eliges, banda o portada?”. La lanzamos al aire y al caer se parte. Es la suya. “Ya lo siento majo, no es tu día, tendrás que ir a la central a por otra. Será que se ha rajado antes, cuando la carrera”, le digo, y nos despedimos amigablemente. Meto la mía, espero a que de vueltas un cacharro, doy a los números, más vueltas, marco sacar dinero y la pantalla dice: operación no disponible. “¡Será cabrón, avisa antes, memo!”. Se forma un pequeño revuelo en la cola cuando se enteran que de momento no da dinero, ya que todos vienen de otros cajeros que no funcionan o que, como es habitual, están en proceso interno (mis tripas sí que están en proceso interno). Me voy a casa, me fumo las colillas y ceno restos. Eso sí, luego te cobran 15 euros de mantenimiento y se quejan de que los abuelos no usen los cajeros.

23 noviembre 2007

El Anacoreta

Si no lo ha perdido en una de sus múltiples mudanzas, mi hermano tiene que tener en casa un póster que le regalé hace ya seis años. Es una foto gigante colocada sobre ocumen y cubierta por un fino metacrilato que se une a la madera con cuatro agarres metálicos. En la foto, que cogí para ampliar del libro Jack Lemmon nunca cenó aquí, está Fernando Fernán-Gómez saludando con las manos agarradas por encima de la cabeza, emocionado ante la impresionante y larguísima ovación que le ofrece el público durante la entrega del Premio Donostia de 1999. El gesto de las manos, con la derecha en vertical apretando a la horizontal izquierda, es un gesto que el propio Fernán-Gómez comentó después que se trataba del saludo ácrata. Y eso a mi hermano y a mi nos gusta mucho, aunque no tanto como el propio Fernán-Gómez, que huelga decir que ha sido nuestro Da Vinci del siglo XX. Quedarse con algo de él es como tener que elegir una canción de El Maestro, ya que trabajó de tal manera y tan bien que tiene casi tantos momentos eternos como clientes hay esperando en la puerta de Pastas Beatriz. Sus conversaciones con Haro Tecglen en La Buena Memoria, sus memorias en El Tiempo Amarillo, el señoritooooo de El viaje a ninguna parte, el maestro de La Lengua de las mariposas, su personaje en El abuelo. La lista es interminable. Pero, para insistir con el saludo ácrata, tal vez me quede con El Anacoreta. Interpreta a un tipo que lleva 11 años encerrado en el baño de la casa que comparte con su ya ex mujer. Recibe a los amigos para echar la partida y escribe mensajes que mete en botellas para lanzarlas por el inodoro. Un tipo peculiar, divertido, ingenioso, sensible, que se ha hartado del mundo exterior y se ha creado uno propio donde sólo entra quien a él le da la gana. Un fuera de serie.

22 noviembre 2007

¿Apagón?

Como recordarán, el viernes a las 20.00 horas se apagaron las luces de la fachada del Ayuntamiento de Pamplona. A las 20.05 horas se volvieron a encender. Es evidente que estos actos no se realizan por ahorro, porque en cinco minutos no se ahorra casi nada, sino por imagen. Por un lado, para ofrecer una imagen de consistorio comprometido con el medio ambiente y, por otro, para que esa imagen vaya calando en el subconsciente colectivo, algo francamente difícil en la sociedad del adosado con jardín, el todoterreno de 8x8 para que el niño vaya cómodo y todas estas cosas. Dicho de otro modo, si como institución no te sumabas a ese gesto a escala nacional es que eras un indeseable despreocupado. Ayer miércoles, 11.05 horas. Hay un sol espléndido y no se ve una sola nube. La luz te ciega, es casi una luz ártica. A esa hora precisa están encendidas todas las farolas de Chapitela, Mercaderes, Curia, Ayuntamiento, Zapatería, Comedias, Pozoblanco, San Antón, San Nicolás y San Gregorio. Supongo que también en el resto de calles de lo Viejo, que no recorro porque tengo que hacer un mandao. A las 11.20 horas se apagan las farolas. Desconozco cuánto tiempo han estado encendidas, ya que cuando salgo de casa por la mañana voy tan dormido que no me he fijado si ya estaban funcionando. No sé si han sido sólo esos 15 minutos, 1 hora, 3 o que directamente no las han apagado desde la noche anterior. Lo evidente es que durante bastante tiempo han estado de más, igual que están de más muchos aspersores de riego que ves chutando mientras cae el diluvio. Por eso a mi hasta que no controlen de verdad bien estas cosas de los encendidos y los apagados y no pongan al mando de los botones a alguien que no sea un inútil se pueden ir metiendo todos los apagones simbólicos por la zona rectal.

21 noviembre 2007

Apuestas

Si existiera esta apuesta, Betandwin pagaría 1,01 euros por euro invertido si UPN y PSN se ponen de acuerdo en los presupuestos. En caso contrario, se ganarían 1.568 euros por euro apostado. Yo preferiría ir a lo seguro y metería 10 eurazos a que se entienden, con lo que obtendría una plusvalía de 10 céntimos, que no está la vida para riesgos. Otra buena apuesta sería acertar la frase que utilizarían para justificar el pacto el tandem Chivite-Jiménez –mi frutero les llama Benito y Manolo, porque, dice, hacen poco y lo que hacen lo hacen mal-: a) son los presupuestos más progresistas desde el 32 (6 euros por euro invertido). b) ha sido largo, duro y difícil, pero se han escuchado nuestras demandas para fortalecer nuestra sociedad (1,5 por 1). c) ¿se ha notado mucho el paripé? (12.003 por 1). d) hemos hecho lo más conveniente y lo que nos demanda la totalidad de nuestro partido, a pesar de los forajidos de las antiguas juventudes, de los papanatas del Foro para el Relanzamiento del Socialismo, de unos cuantos más que se fueron pero que ya hemos sustituido porque tenemos más nuevos abonados que Digital Plus, que lo sepas, y de 9 de cada 10 dentistas (1,9 por 1) y e) ¿podemos pedir el comodín del PSOE? (1,002 por 1). En La Montañesa de esto de los presupuestos no van a hacer porra porque es cómo preguntar si es mejor actor Fernando Fernán Gómez o Eduardo Noriega, que no hay contienda posible, pero quizá sí que caerá una para las generales de marzo. Seguramente lo mejor será hacer un abanico de porcentajes con los resultados de cada partido en Navarra y España y el que más acierte que se lleve la pasta. Mi duda es si al PSN en Navarra le pongo entre 15% y 20% o entre 20% y 25%. Chivite, si tú quieres también te puedes apuntar. Venga, que echaremos unas risas.

18 noviembre 2007

Robapanes

Estoy tomando un café, haciendo tiempo para ver la proyección Una estrella en Gibraltar, de David Marañón, en la que cuenta el cruce del estrecho de Gibraltar a nado, entre otras muchas cosas. Estoy con mi café y entra en el bar un tipo rubio, perfectamente vestido. Cruza todo el pasillo paralelo a la barra y llega al baño. Echa un vistazo y se vuelve. El camarero está haciendo algo en la cocina, así que el rubio aprovecha. Coge una cesta con trozos de pan, la mira, pilla cuatro o cinco, se los mete en un bolsillo de la cazadora, deja la cesta y se va por donde ha venido, tranquilo como él solo. Yo no salgo de mi asombro y cuando vuelve el camarero veo que ni se ha enterado. Le acaban de birlar un tercio de barra de pan con una profesionalidad absoluta. De camino a la proyección trato de imaginar qué ha impulsado al rubio a hacer lo que ha hecho: ¿tenía necesidad real de comerse ese pan, aunque no tenía ninguna pinta?, ¿es puro vicio, como Winona Ryder?, ¿es su pequeña aportación a la queja por la subida del IPC con el pan a la cabeza? Nunca lo sabré, pero justo cuando estoy entrando al lugar donde se emite la proyección me lo cruzo. Trae una sonrisa que, como dice un amigo, podría iluminar una ciudad pequeña. Este figura es capaz de haberse mangao medio jamón, pienso. En la charla, David habla de escaladores, triatletas, nadadores, de espíritus libres en general, de gente que se supera a sí misma por el mero placer de hacerlo. Yo no sé si el rubio escala o no, pero que es un espíritu libre está clarísimo. Quizá ha optado por tomarse la justicia por su mano y aunque tal vez no sea el modo más correcto de hacerlo es evidente que disfruta. Y al final la vida igual se reduce a eso, a disfrutar, ya sea escalando, nadando
, tomando café o robando trozos de pan.

17 noviembre 2007

Vacío

Leo el mensaje que me manda mi hermano: ¿Tienes entradas para el fumbo el domingo? Mi hermano es periodista también, pero a lo que se ve las noticias del partido de hoy de la selección española no llegan hasta Donosti, que es donde curra. El buen hombre tiene fiesta hoy y mañana y ya estaba haciendo planes para bajar mañana al campo, cuando hasta los niños de teta saben que no hay Liga. Le contesto y me reenvía otro mensaje: ¡Mierda puta! Lamento el léxico, pero es lo que hay. Incluso le llamo para vacilarle y decirle que será de las pocas personas sobre la faz de la tierra que no lo sabía. Entonces me replica: Eh, tío, que yo trabajo, no soy un desocupao como tú. Ahí le doy la razón. Tan desocupao estoy que me duele en el alma que mañana no haya partido, todo por culpa de la dichosa selección. Debería haber una ley de salud mental que impidiera parar la Liga por tan banales motivos. Que jueguen los países los miércoles, hombre, que no se puede frenar de esta manera el ritmo vital de los aficionados, 15 días sin ver jugar a nuestro equipo. Porque, ¿qué hago yo mañana, sin partido de Osasuna, sin Fórmula 1, sin ciclismo, sin Irujo? Si ni siquiera hay un triste maratón de nivel que llevarse a la boca. De esos días que me recuerdan al 15 de julio o al 1 de enero, de esos que sólo quieres que pasen rápido, muy rápido. Ya, me podría ir al monte o algo así, pero eso ya lo hago entre semana, que estoy desocupao. Por eso el fin de semana debería ser obligatorio que hubiera Liga de septiembre a junio, sin parones ni tonterías. Que no es que tenga yo nada en general contra la selección, que no, pero de ahí a celebrar que jueguen un sábado hay mucho. Creo que tengo un serio problema de gestión del ocio. Bueno, tranquilo Nagore, que en diciembre hay seis partidos.

16 noviembre 2007

El que avisa

La verdad es que da gusto compartir o haber compartido espacio y tiempo con mentes clarividentes, con personas e instituciones que, con su solo talento y visión, consiguen que nuestras vidas sean más intensas, inteligentes y esperanzadoras. No sé, gente como Asimov, Barbacid o Irache. No, no el Monasterio de Irache, sino la Asociación de Consumidores, que ayer inventó la rueda. ¿Y eso?, se preguntarán. Pues muy fácil. Porque envió una nota de prensa en la que, como Nostradamus en su mejor forma, advertía que “la cuesta de enero puede ser muy complicada para muchas familias”. Siglos y siglos de evolución nos han traído hasta aquí, hasta el punto de que una institución como la que nos ocupa acumula tanto saber, intuición y experiencia que está en disposición de poder advertirnos de cosa semejante, absolutamente inesperada. Y no sólo está en disposición, sino que además lo hace, avisa a sus conciudadanos. Yo en cuanto lo leí empecé a llamar a mi abuela, a mi madre, a mi suegra, a mis amigos, puse una nota en la escalera. Todos me lo agradecieron mucho. “¿Y cómo te has enterado”, me preguntó la del segundo. “Tengo contactos”, le respondí, “y ve con cuidado, no cortes los cachos de pan muy anchos, que luego se pierden”. Porque no sólo hay que defender al consumidor –cosa que estoy seguro que Irache hace estupendamente-, hay que prevenirle, claro que sí, ante los posibles giros del destino. En la misma nota, Irache pedía “moderación de los precios a los empresarios”. Aún no he estado en la calle, pero seguro que el pan lo han bajado a 0,10, la caña a 0,25 y las hipotecas al 1,15%: “dame tres personales a 25 años y una a 10. Sí, sí, para llevar. Me las envuelves para regalo”. Impaciente aguardo la próxima profecía. Por cierto, hoy es viernes. De nada, a mandar.

15 noviembre 2007

Temporal

83 niños de varias guarderías de Pamplona sufrieron el lunes un sarpullido, pero fue temporal. Mi sobrino Juan debió de ser uno de ellos, pero como come peor que su tío pasó mil millas del atún y está como una moto. Un tal Melendi, del que algunos rumores aseguran que canta, montó un pollo transoceánico por ir de Eristoff hasta las cartolas y el comandante del vuelo tuvo que dar la vuelta, ante la imposibilidad, francamente recomendable, de poder abrir una puerta y lanzarlo como pasto para los tiburones. Suponemos que el que dicen que canta lamentará lo ocurrido y explicará que fue un trastorno temporal por su miedo a volar. Pues vete remando, niñato pijo. Aznar llamó a Zapatero para darle las gracias por sacarle la cara, pero ese entente seguro que es temporal. El suelo de la Estación de Autobuses es horrendo y da la sensación siempre de estar sucio y poco pulido, de ahí que pueda ser que sólo sea un apaño temporal, tal y como le ocurrió al suelo de la plaza del Baluarte, aquel filón para los podólogos. Samuel Caro y compañía reparten propaganda del PSOE por las calles, confiando en que vaya pasando el temporal, aunque lo dudo, Samuel, dudo que pase, porque la memoria histórica también sirve en este caso, ¿o crees que lo vamos a olvidar? Todo es temporal desde que la Infanta que inauguró el suelo de la plaza del Baluarte se ha ido a vivir a su otra casa -¿pagan dos hipotecas?- y se ha separado de su marido, un marido temporal del que se ha separado temporalmente para una temporada. Lo que no es temporal, sino eterno, es la presencia constante de estas gentes en nuestras vidas, como si de verdad nos importara una mierda qué coño hacen. Píensenlo, las cosas realmente temporales son las importantes, porque tienen solución. Las eternas son una maldición bíblica.

14 noviembre 2007

Pues eso

Ya lo dijo el gran Pazos: “Lo mismo te digo una cosa que te digo la otra”. En este humilde huequito de papel pasa igual. Lo mismo que cuando se cree oportuno dar candela a los demás se da, cuando hay que dársela al propio autor, o sea yo, pues se hace y ya está, total, para dos días que vamos a vivir. Resulta que la semana pasada, al hilo de lo de Marichalar y su charla de los 3.100 euros, servidor cometió el, a mi juicio, grave error de dar por supuesto algo que no tenía que haber dado por supuesto. Esto no fue otra cosa que afirmar que Paz Prieto –prima de Álvaro de Marichalar- había sido la encargada de contratar la charla de su primo, ya que Paz era concejal de Cultura desde junio y la charla tuvo lugar en octubre y al sumar dos más dos me dio cuatro, pero ya sabemos que no siempre tiene por qué dar cuatro. Fuentes de las que me fío y perfectamente informadas –entre ellas un lector o lectora del blog, gracias- me afirman que la contratación tuvo lugar en marzo, antes de que Paz Prieto llegara al Ayuntamiento. En cuatro palabras: un error de juvenil. Así que, utilizando el mismo espacio en el que se vertió el equívoco y sólo impulsado por mi propia vergüenza, lanzo mis más sinceras disculpas a la susodicha y lamento el trance, del que no tengo disculpa ni excusa alguna porque no la hay. Al que, entonces, sí podemos achacar la llegada del navegante aventurero de los 3.100 euros es a un personaje que ya creíamos olvidado y que nos regaló grandes días de deleite que seguramente la buena de Paz jamás podrá ofrecernos: Pérez Cabañas, concejal de Cultura en marzo pasado, fue el responsable de dar el visto bueno a las charlas de Civivox. Un crack, este hombre. Y como ya he vuelto a mi ser, una pregunta: ¿si nadie controla a los concejales, qué hace la alcaldesa?

11 noviembre 2007

Paul Potts

Para mi la música clásica son los Pistols cantando Anarchy in the UK, los Ramones haciendo su Blitzkrieg Bop, el golpe de batería con el que arranca Like a Rolling Stone o Roy Orbison con el Handle me with care, entre otras 2.000 o 3.000 cosas. A otros les gusta la ópera y a mi me gusta eso. Creo que los dos únicos temas que me han llamado la atención de entre la mal llamada música clásica son el Ave María en el final de Viven y el Nessun Dorma por Pavarotti que encabezaba el inicio de las retransmisiones del Giro por parte de la RAI. Hasta ayer, que me topé con un vídeo en Youtube que ya tiene seis meses pero que para mi era nuevo y aún estoy secándome las lágrimas de la impresión. Es de un tal Paul Potts y canta también Nessun Dorma en una especie de Operación Triunfo británico. Como intuirán, no tengo ni idea de ópera, pero no creo que haga falta saber nada de nada para que te pongas a temblar de golpe con la interpretación de ese tío. Creo que es uno de los momentos más arrebatadores que he visto jamás y lo vi sin conocer en absoluto la historia del tal Paul ni lo que ha hecho después. Nada, sólo poner el volumen a tope y alucinar. Seguramente no tenga ni la técnica ni la habilidad ni el oficio de los grandes divos, pero tiene algo mucho más importante que todo eso, la capacidad de aniquilarte con su voz y su emoción, condensada en apenas minuto y medio de una actuación que llevaría esperando toda su vida. Estoy convencido de que para los puristas es sólo un cantante de karaoke más, pero no me importa en absoluto, porque alguien que no conoce a John Fogerty o no ha escuchado a Neil Young tocar Heart of Gold no está en posición de dar clases ni de hacer divisiones entre música adulta y seria y música para entretener, me parece.

10 noviembre 2007

Sobre campana

El ayuntamiento va a realizar controles sobre el sonido de las campanas en el Casco Viejo, tras la denuncia de varios vecinos. Teresa Martínez, directora de Desarrollo Sostenible, afirma que “es complicado, porque hay muchas personas a las que les encantan las campanas, pero al que está descansando igual le molestan”. A mi no es que me encanten, es que levito a las siete de la mañana – por cierto, a esa hora duermo, no descanso por vicio, es una necesidad vital- cuando suenan y digo: “Gracias, señor, por un día más. Voy a coger caracoles”. Si es fin de semana, sin embargo, a esa hora hace rato que me ha despertado la barredora-limpiadora, que cuando se acerca a tu calle parece que te va a centrifugar las sábanas. Dice también que “vamos a ver si es un problema puntual, porque no hemos tenido quejas de otras campanas que hay en otros lugares, como San Juan”. Claro, están en San Juan como para oír las campanas, con la ruidera infecta que tienen que aguantar de los bares de copas y que ustedes no solucionan. Culmina su intento por estar a bien con todo kiski –voy a poner una campana en casa, de la Iglesia del Primer Juriño, a ver si me dejan- con una última perla: “Hay muchos sonidos que están incorporados a la vida ciudadana y se admiten muy bien y nadie se queja”. Ignoro a qué sonidos se refiere, tal vez al murmullo del agua en un río, a un pajarito que silba, a una hoja al caer al suelo. Mire, olvídese de estudios: están altas, muy altas, te despiertan. Y punto. Da igual que sean iglesias que discotecas o que a unos cuantos –de los cuales el 99% no viven en lo Viejo- les parezca muy bonito. Lo único cierto es que estás durmiendo y a las siete quieres matar a alguien. Le invito a dormir en mi casa. 60 euros noche. Desayuno incluido, a las 7 de la mañana.

09 noviembre 2007

Primos

A ver si nos aclaramos. Que Álvaro de Marichalar Sáenz de Tejada sea primo de Paz Prieto Sáenz de Tejada, que a su vez es concejala de Cultura del Ayuntamiento de Pamplona, es una coincidencia. Nadie elige a sus primos. Y, además, hay que tener en cuenta que Álvaro es de esos que tiene un montón de apellidos por cada apellido, con lo cual debe de andar cerca de los 2.000 o 3.000 primos y lo mismo tiene una prima concejala en Pamplona que un primo limpiacristales en Arre. Nada importante. Que precisamente Paz, en su condición de concejal de Cultura, fuera la encargada de contratar una conferencia de su primo es también una casualidad, ya que Álvaro ofrece sus servicios orales en una página web que se llama thinkingheads –cabezas pensantes- y tal vez Paz fue a apretar el botón de otro conferenciante y sencillamente se le escurrió el ratón, así que ni rastro de posible arribismo, amiguismo o primismo, una mera concatenación de azares. Que Álvaro cobrara 10 veces más que el resto de conferenciantes contratados –3.100 euros, por los 300 que cobraban los demás- no es culpa de él, sino de los otros, que están tirando los precios y hundiendo los mercados, porque a ver quién se compra 10 cajas de leche con los 300 euros que cobraron ellos, a ver. Me reafirmo en lo correcto del gasto al leer la web thinkingheads: “Olvídese de sus prejuicios y disfrute. Álvaro de Marichalar presenta una charla extraordinariamente elaborada, con DVD, voz en off, y una enorme emotividad”. O sea, no viene con el boli Bic azul y una libretita de ésas de Guerrero, no, con un DVD, que cuestan una pasta. Y qué decir de la voz en off, que están a doblón las voces en off. Y qué pasa con la emotividad, ¿no se cobra o qué? Pues claro que sí, que ya está bien de hacer el primo.

08 noviembre 2007

Gato encerrado

El gato de la vecina se ha vuelto a escapar. Oíamos: ¡¡¡Sarkozy, Sarkozy, ven!!! Hay que ver los nombres que le pone la gente a los gatos, le digo a mi rival. Que no, atontao –me contesta-, que el gato se llama Mitxin, lo que pasa es que la señora se metió una sobredosis de televisión en directo con Sarkozy en plan Ti2 en el Chad y ya ves, se piensa que va a venir a rescatarle el gato, que seguro que anda por ahí ronroneando con todo lo que se mueva y sea gata. ¿Quién, el gato o Sarkozy? Los dos, bobo, ¡venga a la cama!. Me quedo pensativo y no veo por qué no va a poder Sarkozy encontrar al gato. Sueltas una noche a Sarkozy en los tejados de lo Viejo y te encuentra lo que haga falta, te lo trae a casa, te da dos besos, le invitas a un Kas, se pone otra vez la capa y sale volando por la ventana y mientras Zapatero en el sofá dormido dando cejazos. Ya vi yo también cuando bajaba el primero el avión con las azafatas detrás y cómo le saludaba Zapatero y como luego Zapatero besaba una a una a las azafatas antes de que las pobres se pudieran echar en brazos de sus familias. Qué diplomacia, dios mío. Digo la de ellas, que soy yo y le meto un empellón al político de turno –sea Zapatero o el que sea- que despega. ¿Qué les cuesta hacerse a un lado y que se abracen con sus familias y luego ya les saludarás si hay tiempo y ocasión? Pues no, ahí, el primero, que se me vea bien lo mucho que hemos trabajado. Hombre, faltaría más, para eso estáis, no para otra cosa. Pero bueno, hay que entenderle, no se iba a llevar todo el mérito Nicolás I El Rescatador. Que, por cierto, ha dicho que va a volver al Chad a por el resto de franceses, “hayan hecho lo que hayan hecho”. No es poco fantasma y colonialista el tío. ¡Anda, ya ha vuelto el gato!: “Mejor volver que besar a Zapatero”.

07 noviembre 2007

Mal ejemplo

Imaginen que el Ministro de Medio Ambiente declarara: “En casa no reciclamos. Vamos, no tengo otra cosa que hacer que separar el cartón del vidrio y éste de lo orgánico y de los envases. No tengo tiempo que perder.”. Y que, acto seguido, a la pregunta “¿reciclamos los españoles?”, contestara: “No todo lo que le gustaría a la Administración”. Se armaría una buena. Laura Alba, Consejera de Transportes, el lunes en este periódico. Pregunta: “Si tiene que desplazarse por Pamplona, ¿qué tipo de transporte elige?”. Respuesta: “A mí por Pamplona lo que de verdad me gusta es andar, pero lo hago poco. Vivo en la Comarca y siempre vengo en coche”. Pregunta: “¿Usamos los navarros el transporte público?”. Respuesta: “No todo lo que le gustaría a la Administración”. Fíjense en el detalle de la primera respuesta, en ese “siempre”. Esto es, hasta cuando no le llevan en coche oficial, la máxima responsable de impulsar el transporte público en Navarra “siempre” va a Pamplona en coche y que le den a la red pública, para después lamentar que los navarros podríamos usar más esa misma red que ella no usa. Lo dejo a interpretación de ustedes vosotros, lectores-as personas humanas. Eso sí, lo que no se le puede negar es que no sea honesta. Ella misma, no obstante, lo afirma, cuando le preguntan quién es: “Una mujer joven y muy honesta”. Cágate lorito. No sólo es honesta, es “muy” honesta. No lo dudamos, vistas sus respuestas sobre el transporte público. Como se suele decir, no necesita abuela, ella misma se lo guisa y se lo jala. Yo pensaba que esa clase de adjetivos calificativos elogiosos había que dejar que los pusieran los demás, pero la consejera parece desconocer esa regla. Obviamente, el resto de la entrevista no la leí, que uno ya tiene una edad. Y se me escapaba el autobús.

04 noviembre 2007

Natos

Les recomiendo que si les apetece suicidarse no se suban a la noria que van a poner en autobuses, que igual les da vértigo. Basta con que crucen el paso de cebra de Padre Moret hacia Baluarte o a la inversa, a la altura de Marques de Rozalejo. Les resultará igual de efectivo, no tendrán tiempo de arrepentirse mientras caen desde arriba de la noria y además a su familia le indemnizará el cafre que les atropelle. No hay que esperar mucho, encima, porque más o menos 8 de cada 10 coches no sólo es que no paran sino que no hacen ni mirar y van a bastante más de 60 o 70 kilómetros por hora, lo que no sé si es legal o no pero si te pillan te hace puré. Hagan la prueba, hagan. Ahí pones un guardia camuflao de limpiabotas -para los que van a la ópera- con un medidor de velocidad y empieza a poner multas y de lo que sacan igual nos quitan la contribución urbana –o nos ponen otra noria de 500 metros de diámetro-. Pero no creo que pongan nada, qué va. Los de tráfico se suelen poner más en las rotondas para formar más atasco del que había, pero para defender a los peatones de los asesinos no hay nadie, así de triste, absolutamente nadie. Se conoce que si pillan en verde el semáforo de General Chinchilla se crecen, pillan rebufo al de adelante, hacen un poco el macarra y para cuando llegan a tu altura no les da tiempo a nada, con lo cual el que te tienes que defender eres tú y saltar hacia atrás como la Comaneci en Montreal’76, antes de desear con toda tu alma -y como todo ser humano que se precie- que se troncen contra algo y que no les pase nada pero que el coche les quede para la chatarra. Resumiendo, que si quieren suicidarse vayan allá, que buenos ciudadanos que quieren a sus familias y amigos y acarician a sus gatos les harán un trabajo gratis y eficaz. Asesinos natos.

03 noviembre 2007

Celos

Les voy a contar algo: este verano estuvimos en Nueva York -New York según Carod-. Sí, los pobres también viajamos, tras mucho ahorrar. Somos tan pobres que le echamos morro y nos alojamos en casa de una amiga periodista -mil besos, Idoya- y le pagamos con una mísera cena. Lo pasamos muy bien y todavía nos duele la marca de la rosca de la boina, porque Paco Martínez Soria a nuestro lado era cosmopolita. Lo que me inquieta es que yo creía que podía aspirar a ser un intelectual o algo así, para lo que quiera que eso sirva, pero ahora me doy cuenta que soy un garrulo más, que tampoco está mal. Porque cada vez que me preguntan qué tal lo pasé en Nueva York respondo lo mismo, de corazón: muy bien, ¿a que no sabes a quién vimos? Esto es, que dentro de 30 años lo único que recordaré será esto: doblamos una esquina junto al edificio de la Time Warner y vemos un tumulto. Estarán regalando txistorras, pensamos. No, es un estreno. Hay fotógrafos, cámaras de televisión. Nos quedamos allá, que estamos baldados de andar. Se para un coche, baja una rubia. Posa, sonríe. ¡Coño, es Jodie Foster! Guapísima. La tenemos a medio metro. Luego viene Robert Downey Jr. Luego Neil Jordan. De repente se intensifican los flashes y aparece él. Se me caen las propias bragas al suelo. Es Kirk Douglas. Estoy paralizado por el terror mientras esta leyenda camina hacia nosotros con sus 91 años, pequeñito y poca cosa, él, que fue Espartaco y tantos otros. Entonces mi rival emerge de la maraña que observa al mito y le da la mano, sólo ella, la única que se atreve entre todo el gentío. Y el abuelo no la suelta y se le queda mirando y sigue apretando y entonces yo recuerdo de qué pasta están hechos los Douglas y pienso: ¡suéltala, viejo cabrón, que seré garrulo pero no gilipollas! Qué jodío, el Kirk.

02 noviembre 2007

La noria

Pienso subirme a la noria el mismo día que la inauguren y no me voy a bajar hasta que la quiten. Voy a acabar hasta la coronilla de ver la Ciudadela, pero yo me hago fuerte ahí fijo, venga de girar día sí y día también, haga el tiempo que haga. Anda que no es buena idea la de Yolandamari de convertir esto en Barcinolandia, con la ilusión que le hace a ella dejar huella y que nos los pasemos bien sus súbditos al tiempo que contemplamos cómo ha quedado de hermosa la Ciudadela gracias a ella. Luego me bajaré de la noria el día que la desmonten, cruzaré Yanguas y Miranda, Conde Oliveto y me meteré en la antigua estación de autobuses a patinar sobre hielo. Pienso estar patinando también hasta que se funda el hielo, así sea marzo. Todo bien rechuli, no me digan. Yo todo lo que sea pasármelo infantilmente bien me encanta. Lo que espero es que algún avispado comerciante sea lo suficientemente osado como para poner un puesto de algodón debajo de la noria, porque subirse a la noria sin algodón no es igual. Y ya si ponen un tirapichón y los camellos y un puesto de pollos asados sería fantástico. Más eventos de estos tendría que haber para que se nos quite la imagen de ciudad color gris-Barcina. Un teleférico hasta San Cristóbal, un complejo comercial submarino en el Arga, una pasarela subterránea que conecte todos los parkings de la ciudad y podamos ver los enterramientos, osarios y ánforas, un rápel desde la Torre Basoko. Lo que haga falta, oigan, que por dinero va a ser. Luego te obliga el Ayuntamiento a arreglar la escalera y la fachada trasera de tu casa y no hay un duro para subvenciones, pero eso a quién le importa, si no se ve. Quita, quita, aquí juerga, noria, hielo y que lo pasen bien las criaturas. Aquí el que no disfruta es porque no quiere.

01 noviembre 2007

¡Lásssstima!

La de disgustos que te puede llegar a dar la vida. Abres cualquier mañana el periódico –por ejemplo ayer- y lees: el PSN critica el gasto de 3.100 euros que para el Ayuntamiento de Pamplona supuso la charla que Álvaro de Marichalar dio la semana pasada en Civivox Iturrama. Mira que venir don Áaaalvaro y yo no enterarme, perder la inmensa oportunidad de escuchar detenidamente cómo nos narra sus aventuras allende los mares embravecidos, surcando los horizontes acuáticos con su moto, o sea. Más dinero tenían que haberse gastado, en publicidad, que mitos así no caen por aquí todos los días. Y yo mientras en casa viendo el Diario de Patricia y a la Jenni decirle al Óscar que se gusta de él y que le perdone. ¡No le perdones, Óscar, que lo de los 14 camboyanos en una sola noche es muy fuerte tío! ¡Y quítate esa gorra, que pareces Bob Hope! Dice también el PSN que Álvaro “no es un ejemplo para la juventud”. Pues claro que lo es. Un figura que es capaz de vivir del cuento como vive él siempre es un ejemplo a seguir y mucho más si hay ayuntamientos dispuestos a gastarse medio millón de pesetas para que narres a la encantada parroquia qué sé yo, que al cruzar el Bósforo hiciste un mal gesto en un salto y se te pinzó un huevo pero el espíritu de San Francisco Javier te iluminó y sacaste fuerzas de dónde no las había porque como tú eres navarro-navarro eres capaz de llegar a Japón con un solo huevo. ¡Lo de Shackleton y sus hombres en la Antártida un juego de niños comparado con lo de este, hombre! Eso cuesta mucho más que 3.100 euros, dónde va a parar. Es criticar por criticar. Ahora mismo voy a ver si soy capaz de bucearme todo el ancho del estanque de Cristo Rey. Y a ver si cuela. Ya estoy viendo el título de mi charla: Un pulmón jadeante. ¡Y también dos huevos duros!